Betis suma su primer triunfo con Andrés Guardado en la cancha

Betis mantuvo su casa invicta y además Manuel Pellegrini le dio minutos a Andrés Guardado para que ahora el Grupo C de la Europa League tenga a todos con tres puntos

El Betis ganó por 2-1 al Sparta Praga en la segunda jornada del grupo C de la Europa League gracias a una remontada que firmó el ex futbolista del Real Madrid, Isco Alarcón con un gol de cabeza a once minutos del final.

Se medían dos equipos en distinta situación en el grupo: el Betis con la obligación de imponer su fortaleza en casa (2 victorias y 2 empates en La Liga) y de estrenarse este curso en Europa, tras caer ante el Rangers (1-0) en Glasgow; y el vigente campeón checo con la ilusión de seguir sumando después de remontar y ganar en Praga al Aris Limassol chipriota (3-2).

Manuel Pellegrini introdujo cinco cambios (el meta Rui Silva, Aitor Ruibal, William Carvalho, Abde y Borja Iglesias) respecto al once que goleó el domingo al Valencia (3-0), a retrasar al medio Marc Roca al eje de la zaga, mientras que el Sparta, que llegó como líder del grupo, salió con su habitual 3-4-3 y con el serbio Veljko Birmancevic y el eslovaco Lukas Haraslín en los extremos, y su máximo goleador, Jan Kuchta, en punta.

El choque empezó con más iniciativa y mejor colocación del compacto bloque checo, que salía tocando bien la pelota ante un Betis algo dormido y despistado, lo que le costó muy caro, cuando sólo se llevaban 2 minutos y medio, al adelantar Birmancevic al Sparta tras colarse entre Roca y Miranda en un centro al espacio desde la izquierda de Rynes y superar en su salida a Rui Silva.

Andrés Guardado tuvo minutos con el Betis
Para la segunda mitad, Pelegrini le dio minutos al futbolista mexicano que sabe muy bien que su rol está más en el banco que como titular indiscutible y cumplió con una función destacada y colaboró para que el Betis sumará sus primeros tres puntos del torneo.

Al cuadro español, con Isco Alarcón perdido en la primera parte, le faltó claridad, mover más rápido el balón para crear juego y más llegada. Los praguenses siguieron a lo suyo y llegando al área local, aunque el mediocampista checo Tomás Wiesner, solo dentro del área, malogró una buena opción con un mal control en otra de las incursiones visitantes.

El Betis, muy incómodo sobre el campo ante el buen orden táctico y las salidas con toques rápidos de los checos, continuó sin hallar el rumbo y sin incordiar a Vindahl -que, al contrario que su equipo, dio muestras de inseguridad- ante un Sparta superior y con más profundidad, pero que no atinó en sendos tiros de Rynes, que remató al lateral de la red en el 33, y de Haraslín, que disparó fuera desde lejos en el 40, y sin Rui Silva en la portería, tras un nuevo despiste defensivo local.

En la reanudación, Pellegrini buscó alternativas y modificó por completo su banda izquierda con la entrada tras el descanso del lateral brasileño Abner Vinicius y del extremo Ayoze Pérez, por Juan Miranda y el marroquí Ez Abde, ante el pobre rendimiento de ambos en la primera mitad.

Y pronto se notó un cambio, pues los verdiblancos presionaron al rival más arriba y con un mayor brío. Isco apareció con un buen lanzamiento de falta que se fue fuera por muy poco en el 50, aunque el líder de la liga checa no se amilanó y, tras un balón perdido por el argentino Guido, el albanés Qazim Laçi remató cerca del área chica, pero Pezzella, providencial en el cruce, despejó lanzándose al suelo.

Después del mayor control y de las buenas llegadas acumuladas por el Sparta Praga en el primer tiempo, el decorado del partido cambió por completo en este segundo. El Betis, ahora más incisivo con la aportación de esos dos refrescos desde la izquierda y luego con la entrada del mexicano Andrés Guardado por Carvalho, dio un claro paso adelante.

Con este mayor empuje y un fútbol más vertical, además del desgaste visitante, el equipo de Pellegrini generó varias ocasiones superada la hora de juego, como un tiro de rosca alto de Isco, ahora mucho más protagonista; otro de Marc Roca; y, el más claro, un remate de Aitor Ruibal, tras una jugada suya por la derecha, que el meta checo salvó con una pierna.

Estos buenos ataques del Betis, fruto de la marcha de más y de la agresividad que le imprimió a su juego, fueron el preludio del segundo gol del conjunto andaluz, cuando Isco, ahora mucho más participativo, batió casi sin oposición con un perfecto giro de cabeza a Vindahl tras un centro de Guido Rodríguez, a once minutos de la conclusión, lo que le dio tranquilidad para amarrar un trabajado primer triunfo en la fase de grupos de esta Europa League.