El Festival Internacional de Cine de Guanajuato abrió su última sede en Irapuato con una charla magistral con Marina Stavenhagen y Claudia Ramírez, actriz con cuatro décadas de carrera, que compartió parte se su experiencia con los asistentes al Teatro de la Ciudad donde Crónica Escenario estuvo presente en esta amena plática.
La veracruzana comenzó hablando sobre los retos que uno enfrenta al ponerse frente a la cámara. “Aprender a lidiar con la frustración es algo que difícilmente superas. Creo que cada vez que te quedas en un proyecto, te llegan esas mismas inseguridades. Esta es una carrera que, no sé si afortunadamente o desgraciadamente, en la que siempre estás muy expuesto a esas emociones, a esos sentimientos, porque atacan directamente a tu autoestima. Entonces no creo que sea algo que puedas superar al final del camino”, aseguró.
Aunque sus papeles en cine y televisión le han ganado un lugar en la industria, Claudia jamás se ha acercado a pedir un papel. “No soy una persona que se acerque mucho a los hacedores, sino que me espero a que me hagan una propuesta para un casting, y a partir de ahí, si me quedo, pues entonces suceden las cosas”, señaló.
“Pero no soy esa persona que está presionando o pidiendo un papel. Me encantaría poder hacerlo y sé que hay muchos compañeros y compañeras que lo hacen, los admiro profundamente porque es una manera de decir ‘quiero que suceda’ y lo logran muchas veces”, continuó.
Sin embargo, Ramírez también destacó la importancia de establecer una gran comunicación con los equipos de trabajo en los que ha estado. “Me encanta tener esa oportunidad de hablar con los guionistas y con el director y ver su visión de lo que quiere contar y plasmar en la pantalla. Me parece un trabajo increíble. Y al final es un trabajo colectivo”.