El movimiento estudiantil que protesta desde hace un mes en Bangladesh lanzó este sábado un órdago a las autoridades, exigiendo la dimisión del Gobierno y rechazando el llamamiento al diálogo de la primera ministra, Sheikh Hasina, en medio de unas manifestaciones que suman casi 200 muertos y que hoy causaron un fallecido y más de un centenar de heridos.
«Nuestra única exigencia es la dimisión del actual Gobierno autocrático. Al mismo tiempo, exigimos la formación de un Gobierno nacional aceptable e inclusivo bajo el liderazgo de una persona aceptable para todos», afirmó en un comunicado Mohammed Mohiuddin, uno de los coordinadores del Movimiento Estudiantil Contra la Discriminación.
Los estudiantes pasaron así de una lista de nueve puntos, entre los que se encontraban la disculpa sin cortapisas de Hasina por la represión de las protestas y la dimisión de varios ministros, a exigir por primera vez la dimisión por completo del Gobierno.
El ultimátum de los manifestantes llegó horas después de que Hasina les invitara al diálogo, en unos comentarios que supusieron un marcado cambio en el discurso oficial desde el inicio de las protestas el pasado julio.
«Quiero sentarme con los estudiantes que protestan y escucharles, no quiero conflicto», afirmó Hasina, según la agencia de prensa oficial bangladesí BSS.
La mandataria también llamó a las autoridades a liberar a los estudiantes detenidos en las últimas semanas, después de que las fuerzas de seguridad arrestasen a miles de personas en diversos casos relacionados con los choques entre manifestantes y la Policía, y prometió celebrar juicios por cada muerte.
«No hay margen para buscar justicia de este Gobierno asesino o para sentarse a dialogar. El tiempo para las disculpas ya ha pasado y cuando había tiempo el Gobierno se dedicó a detener a estudiantes y torturarlos», afirmó uno de los líderes del movimiento estudiantil, Nahid Islam, en la red social Facebook.
Las protestas comenzaron el pasado julio, como un movimiento estudiantil para exigir el fin de las plazas reservadas en las ofertas de empleo público para los descendientes de los luchadores por la libertad en la guerra de independencia de 1971.
Inicialmente pacíficas, las manifestaciones degeneraron en violencia a mediados del pasado mes y han dejado ya al menos 197 muertos, según confirmaron a EFE fuentes hospitalarias, policiales, de bomberos y familiares. El Movimiento Estudiantil Contra la Discriminación, no obstante, eleva la cifra a 266.